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¿Cómo afecta el VIH tu embarazo?

¿Cómo afecta el VIH tu embarazo?

Alrededor de 6 mil a 7 mil mujeres VIH positivas dan a luz cada año en los Estados Unidos. Ser VIH positiva crea más riesgo de sufrir complicaciones como parto prematuro, restricción del crecimiento intrauterino y nacimiento de un bebé sin vida, aunque estos resultados son más comunes en los países en vias de desarrollo.
También se puede contagiar el virus al bebé durante el embarazo, nacimiento o amamantamiento. Sin tratamiento, el bebé tiene un 25 por ciento de posibilidades de resultar infectado. Sin embargo, se puede reducir el riesgo a menos de un 2 por ciento si obtienes un tratamiento adecuado durante tu embarazo. Esto incluye:
•Vigilar tu carga viral
•Tomar los medicamentos apropiados
•Evitar ciertos procedimientos de embarazo
•Tener una cesárea si tu carga viral es demasiado alta y no amamantar.
Gracias a las nuevas medicaciones que ahora están disponibles y a los cambios en la forma en la que se maneja el embarazo en mujeres VIH positivas, sólo unos pocos cientos de bebés resultan infectados por el virus anualmente. Este número podría ser incluso más pequeño si todas las mujeres se realizaran pruebas de VIH antes de concebir o al principio del embarazo, para que pudieran ser tratadas lo antes posible.
CÓMO TRATAR EL VIH DURANTE EL EMBARAZO
Si ya estás tomando medicación para el VIH cuando descubras que estás embarazada, no debes de dejar de tomar esos medicamentos. Una interrupción del medicamento puede hacer que el virus se vuelva más resistente. De hecho, debes consultar con tu doctor inmediatamente.
Cuidados apropiados. Es importante encontrar un médico que tenga experiencia en tratar a mujeres embarazadas con VIH o buscar una clínica de atención prenatal para mujeres VIH positivas, que puede ofrecer un equipo de médicos, profesionales y otros proveedores de salud que cuidarán de ti.
Pruebas necesarias. Tu médico te hará pruebas de sangre a lo largo de tu embarazo para comprobar tu carga viral (la cantidad de virus que tienes en la sangre) y el conteo de células CD4+ (el número de células inmunes CD4+ que tienes). Los resultados de estas pruebas ayudarán a determinar cuándo comenzar a tomar los medicamentos para suprimir el VIH (esto se llama terapia antirretroviral), qué tipo de terapia es la mejor para ti y si el régimen que estás llevando funciona o necesita ser alterado. Si el conteo de tus CD4+ es demasiado bajo, te darán antibióticos para ayudar a protegerte para que no desarrolles una neumonía.
Al final del embarazo, tu carga viral ayudará al médico a decidir si el parto debe ser mediante cesárea. Tu médico hará pruebas de sangre extra para detectar si hay anemia y también comprobará la función de tu hígado, electrolitos y otros indicadores para saber si estás teniendo una mala reacción a tu medicación. Te harán pruebas para saber si tienes otra enfermedad de transmisión sexual así como toxoplasmosis, hepatitis C, citomegalovirus y tuberculosis. También el médico va a querer vacunarte contra la gripe, la hepatitis B y el neumococo.
Elección del tratamiento. Dependerá de los resultados de las pruebas, la condición clínica y lo avanzado que esté el embarazo. Tu doctor tendrá en cuenta la información que exista acerca de cualquier efecto potencial que la medicación pueda tener en tu bebé. Decidir qué drogas usar para tratar a las personas infectadas con VIH es especialmente complicado durante el embarazo porque hay dos pacientes, la madre y su bebé.
No se recomendará ningún medicamento que pueda hacer daño al bebé en desarrollo, pero no hay muchos datos sobre la seguridad de los medicamentos más nuevos, y por eso sus efectos no se conocen bien. Lo más probable es la combinación de medicamentos que mejor suprima el virus, evite las cepas resistentes y preserve la función inmune. Mantener la carga viral baja es importante para la salud de la madre, y para disminuir el riesgo de trasmitir el VIH al bebé.
Cuidados prenatales. Dependiendo de los medicamentos que se estén tomando, se harán ecografías periódicas para comprobar el crecimiento del bebé así como pruebas como perfiles biofísicos y pruebas no estresantes para determinar si el bebé se encuentra bien, a partir del tercer trimestre. Fumar y usar drogas ilegales puede elevar el riesgo de transmitir el virus al bebé.
•Asegúrate de practicar el sexo de forma segura.
•Tener relaciones sexuales sin protección puede infectar a tu pareja y te hace vulnerable a contagiarte de otra enfermedad de transmisión sexual, lo que puede ser arriesgado tanto para ti como para tu bebé.
•Si tu pareja es VIH positivo, también tendrán que usar protección porque existe la posibilidad de que tengan diferentes cepas del VIH que puedan transmitir uno al otro.
•Si resultas infectada con otra cepa puede haber un riesgo adicional tanto para ti, como para tu bebé.
•Pon atención a tu salud mental. Estar embarazada es algo estresante para cualquier mujer y mucho más para mujeres con complicaciones.
DESPUÉS DEL PARTO
Alrededor del primer día después de que el bebé haya nacido, le harán pruebas para determinar si tiene el virus. (Las pruebas de anticuerpos VIH no serán fiables para el bebé porque los anticuerpos del virus pueden permanecer en el cuerpo del bebé hasta 18 meses después, y por eso se le harán pruebas directas del virus). Alrededor del 40 por ciento de los bebés infectados dan un resultado positivo en su prueba después del nacimiento, un 90 por ciento dará positivo a las dos semanas y el resto pueden tardar unos meses. Debido a que es crucial que los bebés infectados comiencen el tratamiento antirretroviral justo después de nacer, le darán medicación al bebé durante las primeras seis semanas, incluso si los resultados iniciales fueron negativos.
Además, le darán medicación entre las cuatro y las seis semanas para protegerlo de neumonía. Incluso si el bebé no está infectado, puede que continúe siendo vigilado durante semanas y años para saber si ha habido algún efecto por haber estado expuesto a las medicaciones antirretrovirales cuando estaba en el útero. Si el bebé está infectado, probablemente será tratado con una combinación de medicamentos para ayudarle a mantener el virus controlado. Algunas mujeres infectadas con VIH tendrán que continuar con la terapia antirretroviral después del parto y otras podrán dejarlo hasta que su condición cambie o los resultados indiquen lo contrario.

No  hay medicamento que pueda erradicar el VIH

Sin Embargo, hay terapias que pueden ayudar a suprimir el virus, para que tu sistema inmune funcione durante periodos de tiempo más largos y retrasar así la aparición de infecciones graves y cáncer. Los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC por sus siglas en inglés) estiman que entre 800 mil y 900 mil personas en los Estados Unidos están infectadas por el VIH.
Hay alrededor de 40 mil nuevas infecciones cada año, un 30 por ciento de ellas en mujeres. La transmisión del VIH se considera un serio problema en la comunidad latina. El VIH ha sido en años recientes la cuarta causa de muerte entre hombres y mujeres latinos entre 35 y 44 años.
IMPORTANTE: Se recomienda que todas las personas entre los 13 y los 64 años de edad se hagan la prueba de detección del VIH por lo menos una vez como parte de su rutina de salud. Las personas con un riesgo más alto del VIH deberían hacerse la prueba más a menudo.