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¿Está tu bebé listo para nadar?

Una de las causas más comunes de fallecimientos de los bebés es el ahogo en piscinas (piletas o albercas), por lo que no está de más que le enseñes a sobrevivir en el agua, y así evitar peligrosos accidentes. Eso sí, antes de decidir si conviene que aprenda a nadar, es importante que sepas que hay expertos que no recomiendan hacerlo antes del tercer año de vida.
La Academia Americana de Pediatras reveló estadísticas escalofriantes de los accidentes sufridos por los niños en zonas cercanas al agua, algunas de ellas son:

  • La mayoría de niños en Estados Unidos muere ahogados.
  • El 70% de los casos en que los niños se han ahogado, han estado bajo la supervisión de sus padres.
  • La piscina está relacionada 14 veces más con las muertes de los niños menores de cuatro años, que las muertes relacionadas con los accidentes automovilísticos.
  • El 5% de los niños (menores de 15 años) muere ahogados en Estados Unidos en accidentes en botes.

Por otro lado, La Academia Americana de Pediatría no recomienda poner a los niños menores de tres años en clases de natación, y recomienda a los padres que tengan cuidado al sumergir a sus hijos en una piscina, porque los químicos de la misma pueden ser dañinos para su hijo, o puede tener contaminación fecal, y muchos riesgos más que están relacionados con la inmersión de los pequeños en una piscina.
Si decides que sí es hora de que tu hijo aprenda a nadar, existen varias maneras de hacerlo. Puedes llevarlo a clases en una piscina especial donde haya un instructor capacitado. También puedes contratar lecciones privadas o aprovechar nuevos sistemas que han salido al mercado.
Novedoso sistema para enseñar a nadar
Nadando 1,2,3 es un programa diseñado para los padres que quieran enseñar a sus bebés a nadar, poco tiempo después de su nacimiento, a través de la utilización de herramientas que garanticen su seguridad y mantengan a los niños flotando en el agua. Y a medida que el niño crece, mejorarán sus aptitudes para la natación y aprenderá por sí mismo a nadar debajo del agua.
Una de las herramientas diseñadas para enseñar a tu bebé a nadar en casa, es el chaleco flotador de bebés. Con él, podrás enseñar a tu pequeño nadar inmediatamente después del nacimiento mientras lo bañas en tu casa. Los bebés aman su baño diario y en la medida que el niño tenga la oportunidad de flotar en el agua, tendrá la oportunidad de aprender a flotar en la posición de supervivencia, sobre su espalda.
Los bebés no pueden entender la teoría de la natación, pero sí pueden aprender a través de tocar y sentir. Además ellos mantienen en su memoria su sentido natural de flotar, porque eso es lo que justamente hacen dentro del vientre de su madre.
La parte más pesada del cuerpo del bebé es la cabeza y es muy importante mantener dicha parte del cuerpo a flote. La característica principal del chaleco para nadar es el panel que tiene para mantener la cabeza del bebé a flote y facilitará que el pequeño aprenda a hacerlo, instintivamente, y en qué posición debe mantenerla para conseguirlo. Por otro lado, este chaleco no queda muy apretado, por lo cual no le causará ningún daño. Cada pedazo de espuma se moverá separada y simultáneamente, según la fuerza y movimientos de los brazos y piernas del bebé.
Los padres que durante los primeros doce meses de vida del niño lo dejan nadar mientras lo bañan en la tina contribuirán a que el bebé refuerce sus conocimientos sobre la natación segura antes que cumpla su primer año. Además, tiene otras ventajas:

  • Aprenderá a reconocer sus propias limitaciones físicas de la supervivencia en el agua.
  • Conocerá los peligros que el agua tiene para su supervivencia y será más cuidadoso.
  • Notará que la posición de su cabeza es la clave para mantenerlo respirando.
  • Se dará cuenta que él no puede mantener su cabeza hacia abajo en el agua.
  • Podrá ver que puede usar sus piernas para ponerse sobre su espalda.
  • Aprenderá a estar en la posición de supervivencia sobre su espalda y a gritar hasta que llegue ayuda.

Como ves son muchas las ventajas que la natación temprana puede brindar a tu hijo. Es responsabilidad de los padres preocuparse por la seguridad de sus pequeños, eso sí. Los niños no deben ser expuestos a las piscinas hasta que ellos no aprendan sobre sus limitaciones de sobrevivencia.
El siguiente paso es colocarle al bebé un traje de baño flotante siempre que esté cerca al agua. Algunos modelos tienen 6 bolsillos exteriores, los cuales tienen unos tubos flotantes que garantizan la seguridad del pequeño. Los flotadores de cada bolsillo pueden ser removidos en la medida en que el niño aprende a flotar. Si ves que tu niño ha mejorado en sus aptitudes para la natación, puedes remover 4 de los flotadores instalados dentro de los bolsillos de su trajebaño.
Pero no olvides que la fatiga es el peor enemigo para los niños cuando están en la piscina, por eso es mejor estar prevenidos y hacer que el pequeño utilice algún traje de baño con flotador incorporado. Y recuerda que millones de casas tienen piscinas en sus patios o están rodeados de agua. Trata de enseñar a tus hijos sobre sus peligros y cómo sobrevivir en el agua.
Te aconsejamos que lo pienses bien antes de meter a tu bebé en clases de natación y evalúes sus ventajas y desventajas. Quizás es bueno consultarle al pediatra sobre el tema. Buena suerte en tu elección.