Los efectos negativos de fumar durante el embarazo para la mamá y el bebé han sido demostrados de forma repetida en muchos estudios de investigación. Un nuevo estudio realizado en el Monell Chemical Senses Center ha demostrado que el riesgo continúa durante la lactancia.
Los bebés que son expuestos a la nicotina y otras toxinas de los cigarrillos duermen menos después que la mamá fuma, que aquellos bebes cuyas mamas se abstienen de fumar. El estudio demuestra cómo fumar altera los patrones del sueño del bebé y la mamá.
Además, otros estudios han demostrado los efectos negativos que puede tener la nicotina en el desarrollo cerebral del bebé y también el alto riesgo de que el niño/a fume durante la adolescencia si su mamá fumó durante su infancia.
Por lo tanto, si estás amamantando a tu bebé, evita el cigarrillo. No sólo lo protegerás de problemas respiratorios sino que todos en tu casa dormirán mejor.